¿Cómo reclamar por las acciones del Banco Popular?

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¿Has perdido tus ahorros por culpa de la compra del Banco Santander sobre el Banco Popular? ¿Tus acciones y bonos han quedado sin efecto? Sí, tu dinero se ha esfumado, en una operación que ha contado con el beneplácito de las autoridades europeas y en contra de los más de 400.000 accionistas que tenía la entidad, quien de la noche a la mañana han visto como todo el activo depositado en acciones del Banco Popular se ha desvanecido. ¿Es esto legal? Vamos a comprobarlo.

Los afectados por el crash del Popular tienen opción de acudir a la justicia para reclamar su dinero. Un dinero que, desde el primer momento, el Banco Santander dijo que no iba a devolver y que se prepararían para hacer frente por vía judicial a quien ejerciera sus derechos. Una operación sin precedentes.

Es necesario recordar el origen de los hechos. El 7 de junio las autoridades europeas desde Bruselas autorizaron que la entidad que preside Ana Botín adquiriese, por un euro, el Banco Popular. Era la forma de hacer frente a la falta de liquidez previsible que tendrían el banco dirigido por Emilio Saracho Rodríguez, quien asumió las riendas tras la salida del anterior presidente Ángel Ron, ya con la entidad financiera en una delicada situación.

De esta forma se pretendía evitar que los clientes del Popular perdiesen sus fondos y sus cuentas corrientes, que no dispusiesen los cajeros ni las entidades de dinero, y que se colapsase el sistema. Pero esa decisión tuvo unos daños colaterales: cerca de 400.000 accionistas perdían el 100% de su inversión (accionistas, bonistas e inversores). Aquí se incluyen desde pequeños accionistas particulares hasta trabajadores del banco, consejeros y grandes accionistas con millones de euros en juego.

Las opciones legales de los accionistas del Banco Popular

Ante esta indefensión los inversores tienen mucho que decir. Al tratarse de un tema reciente aún no hay sentencias en firme ni soluciones definitivas al respecto, pero los afectados ya han comenzado a moverse. Evidentemente los grandes grupos inversores, y las empresas que tenían participación en Popular, poseen sus propios gabinetes con los que defenderse ante el Santander.

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Lo que sí debes saber es lo siguiente. La vía civil está abierta para ti, además de las opciones penales que puedas emprender por la gestión de la entidad. Estas son las diferentes alternativas que como accionistas del Popular tienes, ahora mismo, a tu disposición.

Una de ellas es demostrar que el folleto del Popular era falso. ¿Qué quiere decir esto? Que la entidad presentó unas cuentas y un proyecto basado en falsedades con el objetivo de engañar al inversor para atraer su dinero. En este caso la demanda irá dirigida contra el Banco Popular y sus dirigentes. Y será el Santander quien tenga que defenderse por ello.

Con ello se busca la nulidad de la compra de esos títulos basándose en vicio de consentimiento: el accionista compró un paquete creyendo que los datos que aportaba el Popular eran ciertos. Y en este sentido ayuda la comunicación del propio Banco Popular a la Comisión Nacional del Mercado de Valores el 3 de abril de 2017 en el que se admitían errores contables por valor de 600 millones de euros en el ejercicio de 2016, según informaban los principales diarios económicos en España.

Los especialistas advierten de que esta opción caduca a los cuatro años desde que se tiene conocimiento del error. Y a esta opción podrían adherirse principalmente los últimos accionistas, quienes compraron sus papeles en 2016 y 2017.

La ampliación de capital de 2016, fecha clave

Para quienes en 2016 acudieron a la ampliación de capital de la entidad (entre el 26 de mayo y el 21 de junio de 2016) tienen un camino con más opciones, y un abanico más amplio que el resto de accionistas. Pero ojo, porque hay que estar muy atentos a la letra pequeña porque ahí se esconden los contras de una operación que puede parecer, en un primer momento, favorable.

Recientemente, el miércoles 12 de julio, el Banco Santander anunció que compensará a aquellos accionistas más fieles, lo que ellos entienden por quienes acudieron a la mencionada ampliación de capital, unos 110.000 afectados según estiman.

Lo harán a través de una ‘acción de comercialización’ consistente en entregar obligaciones perpetuas amortizables de 100 euros de valor nominal, que ofrecerán una remuneración en efectivo del 1% durante cada trimestre, y durante siete años.

Pero para adherirse a esta opción el inversor debe cumplir una serie de requisitos muy excluyentes y que sirven para atarlo de pies y manos. La primera es que, quien reciba estos valores, renunciará para siempre a emprender acciones legales contra la entidad. Una forma de cubrirse las espaldas y evitarse miles de posibles demandas.

Además solo serán ofrecidas a quienes mantuvieran las acciones compradas en la ampliación hasta el mismo día de la desaparición del Popular, el 6 de junio. Si se vendieron antes, aunque fuesen solo unos días (algo normal visto el pánico que surgió en el parqué sobre el papel del banco), no serás recompensado.

Pero no solo eso. Para que el inversor vea recuperado su dinero a través de este modelo, tendría que haber tenido depositadas las acciones o la deuda en el Banco Santander, Popular o Banco Pastor. Por lo tanto un requisito más, aún más excluyente.

Y por último (sí, aún hay más…) el afectado tendrá que haber mantenido en el Banco Popular o Banco Pastor el resto de productos que tuviese contratados, como cuentas corrientes o fondos de inversión. Es decir, que si ha dejado de ser cliente de esta entidad, has perdido tu ‘derecho’ a ser agraciado con que te devuelvan lo que es tuyo sin acudir a la justicia.

Tampoco se incluirán en esta ‘acción de comercialización’ grandes inversores, los que tuvieran más de un millón de euros invertido.

Si se da el milagro y cumples toda la lista de condiciones impuestas por el banco que preside Ana Botín, lo mejor es que antes de aceptar nada consultes con un abogado especialista en derecho bancario. En Easyoffer te lo ponemos fácil: a través de Internet, con solo rellenar un formulario en el que explicas tu situación, te facilitamos hasta tres presupuestos gratuitos y sin compromiso para que encuentres a tu letrado de confianza cerca de ti.

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El antecedente: Bankia

Es cierto, aún es difícil saber hacia dónde irá la justicia en las reclamaciones de los inversores del Banco Popular. Lo que sí se sabe es qué sucedió hace poco más de un año con un caso no igual pero sí similar, el de Bankia.

En aquella ocasión los inversores reclamaron sentirse engañados por la salida a bolsa de la entidad (el 20 de julio de 2011), liderada por aquel entonces por el ex ministro Rodrigo Rato, y que a posteriori se confirmó que la información facilitada por la compañía no se ajustaba fielmente a la realidad.

Ello derivó en que, en febrero de 2016, el Tribunal Supremo sentenciase la nulidad de la adquisición de esas acciones con motivo de la Oferta Pública de Suscripción (OPS) de Bankia. Atentos a las fechas, porque la resolución tardó casi cinco años en salir. Por lo tanto, paciencia, amigo inversor, porque desgraciadamente las cosas de justicia van despacio en muchos casos.

¿Contra quien presentar la demanda?

Esta es otra de las grandes dudas que plantea este caso, y que habrá que despejar. De momento se ha apuntado hacia varios posibles culpables y las demandas susceptibles de ser presentadas tienen en su diana a varios objetivos.

Uno de ellos, quizá el principal señalado, en este caso señalados, es la cúpula directiva del ya extinto Banco Popular. Ángel Ron primero, y Emilio Saracho después, han sido los presidentes al frente de la entidad durante este tiempo tan convulso que ha desembocado en la desaparición de la entidad y en la pérdida de patrimonio de los accionistas.

Por lo tanto ellos dos, junto con el resto de directivos de la compañía, acaparan las miradas de quienes desean recuperar su dinero. Su mala gestión y la falsedad con la que expusieron sus cuentas son dos de los motivos que hacen pensar que la Justicia puede tomar cartas en el asunto.

De hecho Ron ya ha tenido un capítulo con los tribunales ya que un juez negó la indemnización millonaria que el directivo pedía al Popular por despido improcedente; una cuantía que según fuentes judiciales ascendía a 4.3 millones de euros. Dinero que habría que sumarse a los 24 millones que el Popular sí otorgó, esta vez sin oposición de la justicia, a Ron mediante una póliza de seguros vitalicia.

El segundo grupo señalado por los inversores es el formado por los actuales propietarios del Popular, es decir, el Banco Santander. La multinacional prevé recibir miles de demandas por lo que está preparada para hacerlas fente. Y se espera que el aluvión de denuncias contra ellos sea caudaloso y constante en el tiempo.

Por último, otra de las posibles vías de actuación judicial irá dirigida hacia las autoridades. Las europeas, por permitir esta operación que deja tirados a cientos de miles de inversores. Y contra las nacionales, como el Banco de España. Aunque contra este tercer grupo parece, a priori, más complicado hacer reclamaciones.

¿Qué cuantía puedo reclamar por las acciones del Banco Popular?

Esta es otra de las dudas que saltan sobre el accionista que ha perdido su dinero. ¿Tendré derecho a una indemnización? ¿Me devolverán todo el importe, o solo una parte? ¿Podré recuperar algo?

Según apuntan varios especialistas, lo habitual en estos casos es aspirar como máximo a recuperar la cantidad invertida, sin esperar ningún tipo de contraprestación por daños o perjuicios. Además a esa cantidad total habría que restar rentabilidades como, entre otras, las derivadas por dividendos.

¿Qué inversor tiene más fácil recuperar su dinero?

Dentro de los más de 300.000 accionistas de la entidad, a los que hay que sumar bonistas y otros inversores de deuda subordinada, hay diferentes perfiles. Y todos tendrán derecho a reclamar su dinero, aunque unos lo tendrán un poco más fácil que otros.

El cómo y el cuándo son preguntas clave. Del cuándo hemos hablado algo, sobre la fecha de la ampliación de capital. Según especialistas, quienes compraron en medio de las turbulencias, cuando el Popular emitía su canto de cisne y se veía precipitado hacia el abismo, será más complejo recuperar su dinero. Nos referimos en este punto a quienes intentaron buscar rentabilidad los días o semanas previos a la desaparición de la entidad.

Quienes lo hicieron en 2016 o a principios de 2017 tienen más opciones, porque son las fechas en las cuales se produjo la ampliación de capital y se emitió información, por parte del Banco Popular, que no era correcta.

En duda está el saber qué pasará con quienes poseían títulos de la compañía desde hace años, aquellos inversores más longevos que han podido conservar sus acciones durante años.

En cuanto al cómo, esto también es importante. No es igual la situación del que acudió libremente al mercado para hacerse con acciones del Banco Popular, que actuó voluntariamente sin condicionantes (por supuesto no olvidamos que el folleto no cumplía con la realidad); que la situación de otra persona que fue condicionada para adquirir estos títulos. En este segundo apartado entran aquellos que fueron asesorados por la propia entidad para comprar papel de la empresa, o quizá empleados que recibieron títulos como complemento al sueldo.

Eso sí, en ningún caso el cómo y el cuándo son excluyentes de emprender acciones legales. Cualquier persona que se haya visto afectada por la compra del Santander, y que haya visto su inversión reducida a polvo, tendrá la opción de acudir a los tribunales y/o buscar una alternativa extrajudicial.

En cuanto a los costes que supone reclamar a la entidad la devolución del dinero perdido, lo mejor es consultar a un abogado especialista en derecho bancario que pueda darte una respuesta adaptada a ti. Como hemos visto no se pueden meter en el mismo saco a todos los inversores del Popular, por lo que lo más recomendable es contar con un profesional que trabaje tú particularidad, y no algo colectivo que puede dejarte fuera del pacto. Ya que de lo contrario puedes estar tirando piedras contra tu propio tejado.

Para hacer sencillo el contacto con un profesional de garantías, de confianza, y con amplios conocimientos sobre la materia, en Easyoffer te lo ponemos fácil. Cuéntanos a través del formulario online que verás en nuestra web tu situación concreta, la tuya: cuándo adquiriste las acciones del Banco Popular, de qué modo, por qué cantidad, etc. Con ello te enviaremos, de forma totalmente gratuita y sin compromiso alguno, hasta tres presupuestos personalizados de abogados especialistas dentro de tu zona. De esta forma te será fácil comparar y elegir con quién quieres ponerte en contacto. No dejes que tu dinero se desvanezca.

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